hace poco leí que creer tanto en esa fantasía de estar muerto nos hace sentirnos cómodos con la idea de la muerte, de lo inexistente...y que cada vez se hace más grande el miedo a vivir.
Quizas a todos nos hace falta sentirlo de vez en cuando....si es bueno, no lo sé?, pero aveces sentirte muetto te evita "sentir" y hay cosas que cuando estas vivo quieres no sentir.
la muerte y sus mil caras... no la del sepulcro de sombras desolada... la muerte que probó aquel que tanto ama... que herido de decepción, murió pero en el alma... La muerte consciente... esa muerte buscada... de desaparecer en el aire... morir y no ser nada... Aquel que muere viviendo, conoce bien las llagas... de esa muerte que en vida se saborea y se extraña
Todas las noches nos vamos a morir un rato, y al volver nos sucede eso que una vez dijo E.M.Cioran "el pesimista debe inventarse cada día nuevas razones de existir: es una víctima del "sentido" de la vida". Aclaro algo, jamas tuve envidia a los optimistas. Un fuerte abrazo.
13 comentarios:
:S
hace poco leí que creer tanto en esa fantasía de estar muerto nos hace sentirnos cómodos con la idea de la muerte, de lo inexistente...y que cada vez se hace más grande el miedo a vivir.
Sera?... en serio que leí eso
Quizas a todos nos hace falta sentirlo de vez en cuando....si es bueno, no lo sé?, pero aveces sentirte muetto te evita "sentir" y hay cosas que cuando estas vivo quieres no sentir.
Besos.
No, yo la verdad no extraño ni tantito estar muerta. Duele mucho estar ahí.
Hay momentos para todo...pero espero que los segundos sean los menos...
un abrazo!
A veces hace falta no estar, no ser, encerrarse en un silencio de tumbra clausurada.
de un muy bello libro que se llama Caracol de tierra, de Ámbar Past, es este poema:
"Sueño"
Perros negros, amarillos, blancos:
Estoy tan acostumbrada a no estar muerta.
Cruzando éste hay otro río.
Estoy tan acostumbrada a no estar muerta.
Ah, pobre perro,
ven a visitarme, come tu tortilla.
Me vas a llevar al otro lado, perro amarillo.
A veces sueño,
¿Ahí estás? me preguntan.
Ay, pero no quiero ir con ustedes, les digo.
Estoy tan acostumbrada a no estar muerta.
la muerte y sus mil caras... no la del sepulcro de sombras desolada... la muerte que probó aquel que tanto ama... que herido de decepción, murió pero en el alma...
La muerte consciente... esa muerte buscada... de desaparecer en el aire...
morir y no ser nada...
Aquel que muere viviendo, conoce bien las llagas... de esa muerte que en vida se saborea y se extraña
Te entiendo. Porque muchas veces me pasa exactamente lo mismo.
Vaya que es complicado vivir!!! Abrazos.
BETTINA PERRONI: Es posible pero creo que extrañar estar muerto es una sensación diferente, bastante extraña por cierto. Gracias.
Yessi: Entonces creo que hay cierta comodidad en sentirlo así. También es muy bueno tu aporte. Gracias.
Sylvana:¿Pero cómo sabés que duele? Contame, dale, porque estoy muy intrigado. Gracias.
hawwah: Sí, que no nos laceren pensamientos demasiado negativos. Gracias.
Furtiva: Coincido, sé de esa necesidad. Gracias.
jose fá: Bellísimo. Gracias por este hermoso regalo. No conocía a esta poeta.
Grina: Este comentario es una maravilla. Me encantó. Muchas gracias. Me gustaría poder entrar a tu blog pero no se me permite.
Abril Lech: Me sorprendiste. De veras. Simplemente no pensé que te ocurría. Gracias.
fgiucich: Qué lo parió, dijo Mendieta. Gracias.
Y yo, y yo...menos mal que las mañanas duran casi lo que un instante.
Besos y buen despertar de domingo.
Todas las noches nos vamos a morir un rato, y al volver nos sucede eso que una vez dijo E.M.Cioran "el pesimista debe inventarse cada día nuevas razones de existir: es una víctima del "sentido" de la vida". Aclaro algo, jamas tuve envidia a los optimistas.
Un fuerte abrazo.
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